miércoles, 11 de marzo de 2009

Mi amado Mr. M


Mi amado Mr. M debe estar al borde de la locura con el ajetreo del comienzo de clases, debe estar psicoseado de tanto piense y piense como generar más dinero y no morir en el intento. Tiene tantas ganas de soñar, de no levantarse un día y estar como un caballo tirado en el sillón, olvidandose de la educación y comiendo como un cerdito.

Según sus propias palabras el sueña con la tranquilidad, con despertarse un día y no ir a trabajar, alguna vez soño conmigo y pensó así como es, así hará el amor?, tuviste el descaro de preguntarmelo un día. Rojos los dos, viendonos a los ojos, palteados, llenos de deseo esa noche, con la libido al límite, con los cuerpos estrechados de tanto amar. Sentiste mis locuras, mis sentimientos y el latido de mi corazón mientras estaba a tu lado, un dulce beso me diste en la puerta del depa al despedirme y solo una sonrisa era testigo de esa locura salvaje, como tu la catalogaste. Salvajes son mis sentimientos por ti, salvaje es la idea de no saber de ti y pasarme medio día preguntando si estas bien a alguien que te conoce.

Mi amado Mr. M, solo deseo que tengas una M de maravilloso, que todo te salga bien, mi dulce y amado, loco y chiflado Mr. M.

1 comentario:

Sandra Texeira dijo...

una vez pensé q la felicidad era en realidad el sinónimo más próximo de la tranquilidad (creo que ya me he cansado de vivir al límite)
también pensé que la verdadera felicidad era no deberle nada a nadie, poder tirarse en la cama como chancho y decir:
deudas: cero
tareas por entregar: cero
trabajos por cumplir: cero
presupuesto para vivir: balanceado
gente que te quiere y a quien querer: presentes
conclusión:
felicidad total: no deberle nada a nadie (nisiquiera ti mismo)