Te diría tantas cosas, como que la luz irradia en tus ojos una mezcla de esperanza. Que tu mirada me mata, que tu sonrisa es la más hermosa que he visto luego de la de mi hija, que me gusta verte, que a veces me pierdo en lo que hablas por solo contemplarte, que me gusta mirarte, que me encanta oirte. Que odio y amo esa forma tuya de hablar tan rápido así como escribo, que adoro la forma como vas al pasado y vuelves y al presente en menos de tres segundos. La rapidez de tus palabras, tu sonrisa, tu forma de fumar tus cigarritos hacen que algo en mi piense en ti. A veces creo que no debo, no debería poner mis ojos en ti, tan fijamente. No debo, porque no eres para mi, porque solo eres un amigo, hasta ahora me he ratificado en eso, pero mi mente tan volátil vuela, vuela y no la puedo controlar, tan odiosa, tan espesa, siempre me gana en los avatares del amar.
No debo verte con los ojos libidinosos con los que te veo, no debo siquiera pretender acariciar en sueños tu piel, pero si en la realidad te tengo más cerca de lo que soñé pretender. Dios mio no se que pase, pero solo quiero ser constante, por primera vez en mi vida, con algo tan perfecto como haberte conocido...y pensar que fue de la forma menos pensada. Ojalá algún día puedas tener esa felicidad que anhelas, si es en otros rumbos igual sería muy feliz porque tu lo eres, y asi suene trillado, sabes que es verdad. Aunque muy, muy en el fondo, quisiera con todas las fuerzas, que te quedaras conmigo...por hoy...por mañana...por siempre. .....Creo que me estoy enamorando? otra vez?? Cupido juega otra vez, pero esta vez...no quiero perder.
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