sábado, 16 de agosto de 2008

Las letras que plasmé, el cuento que inventé sobre el gato de bronce


Estar en el hospital fue una experiencia por demás traumática, me sentí sola, sin mi hija, sin mis padres, sin mi perro. Deseaba con ansias estar en casa, ver a mi hijita, jugar con Yogui mi cooker negro, peludo y juguetón.
Cada noche lloraba, no se porque razón, sentía un vacio sumamente angustiante, que me reprimía en todo sentido, que me quitaba la lucidez. Mientras yo lloraba, a mi alrededor las quejas, el llanto, el olor a muerte casi siempre presente a cada segundo me martirizaba. No quería estar en ese lugar...quería escapar a algún lugar...y fue así como empecé una historia...de arlequines y reyes...donde un gato de bronce...me salvó de milagro.

2 comentarios:

Sandra Texeira dijo...

ponnos la historia del gato de bronce, queremos leerlaaaaa!!!
siiiiiiiiiiiiiiiiiii!

Sandra Texeira dijo...

ponnos la historia del gato de bronce, queremos leerlaaaaa!!!
siiiiiiiiiiiiiiiiiii!